
Quizás es inseguridad,
quizás es el miedo;
me expongo a ti con la libertad de tu encierro,
con la tristeza de tu alegría,
con la calma de tu desesperación;
ante tu sonrisa muda pero agradable,
ante tu mirada fija e irónica,
ante tu corazón abierto y esperanzado,
ante tu voz calmada y dulce.
¿Será la inseguridad o es el miedo?
Ahora creo que no es nada y lo es todo....