
Prende tu perfume y hablame,
cuentame tu suerte y calla tu verdad,
escribe con tu aliento el pensamiento.
Sàcame la rabia envuelta en mi estòmago
y quèmala hasta dejar cenizas.
Caminemos hasta quedar recogidos,
hasta sangrar los tobillos.
Seràs mi excusa desde ahora
y no seràs nada si todo lo eres...